FINAL DEL CARIBE

Antes de abandonar Le Maren (Martinica) decidimos instalar sobre el mástil unos escalones que compramos en Sant Marteen, ibamos dejando de un día para otro ese trabajo aunque lo cierto es que una vez estuviese realizado nos proporcionaría una gran tranquilidad ya que nos permitiría revisar asiduamente el estado de obenques, stay , poleas de drizas etc.

Así lo hicimos y casi completamos llegar hasta su extremo superior, nos faltaron unos 5 unidades mas, la próxima vez calcularemos mejor, de cualquier modo ya podía llegar con algo de esfuerzo y hacer una primera verificación de su estado actual. y eso fué lo que hicimos descubriendo afortunadamente a tiempo que uno de los hilos de inox. que conforman el cable trenzado del Stay se hallaba roto con el consiguiente riesgo de rotura y las consecuencias que se podrían derivar, no alcanzaba a comprender como tras dos años de su colocación estaba en peor estado que el instalado inicialmente hace mas de 20 años.

Tras las gestiones y compra del nuevo cable, al día siguiente, sábado, estábamos en un amarre, listos para iniciar el azaroso y duro trabajo que fué a las mil maravillas consiguiendo a las 6 pm volver a nuestro fondeo, satisfecho y con un trabajo bien hecho, estábamos nuevamente listos¡

En Le Marín conocimos a varios compatriotas nuestros que tras participar en la ARC y disfrutar un tiempo del Caribe esperaban el mejor momento para poner rumbo nuevamente a nuestra tierra, enhorabuena a Esther y Albert que con su Katay realizaron una fantástica travesía sin escala en Azores y aunque algo temprana según el calendario todo les ha marchado de maravilla.

También conocimos a Mario con sus dos hijos (de 14 y 9 años) Valeria y Mario jr. que han tenido una enriquecedora experiencia, y ya planean ilusionados como será su siguiente gran singladura, esperemos vernos pronto nuevamente y deseamos que vuestra vuelta vaya acompañada de los mejores vientos. (Muchas Gracias Mario por esa inestimable ayuda que me distes para cambiar el stay. Prometo no pasar por G.C. sin ir a saludarte).

Lunes 28 de Abril nos dirigimos hacia la isla de Sta Lucía en una navegación que para si quisiéramos siempre, al igual que todas las que van sucediéndose hasta hoy, un viento constante entre los 18 y 25 nudos, una mar llana que escasamente llega a formar algunos rizos, y unas distancias que se cubren casi siempre entre la mañana y la tarde, … por cierto los peces están de vacaciones.


Hicimos escala en Rodney bay, (Sta. Lucía) tranquila y segura, donde no faltan los locales ofreciéndote, el pan la fruta o la bandera correspondiente. Sus aguas limpias y transparentes invitaban a un refrescante baño que no perdonamos, de ahí avanzamos hacia nuestro destino sin demorarnos mucho en las escalas, pues deseamos conocer en pronto los famosos cayos de Tobago.

Nuestra nueva navegación nos llevo camino de Sant Vincent no sin antes hacer las obligadas paradas en Marigot Bay y las Pitones lugares donde la naturaleza se recreo confiriéndoles una belleza singular.

Abandonamos Sta Lucía para dirigirnos a San Vincent, fondeando en Wallilabou bay, lugar donde se rodaron las escenas de las películas de piratas del Caribe, aún quedan en sus orillas los restos de decorados, la cantina etc . Para los locales fue toda una fiesta de la que todavía sacan partido pues no dejan de llegar veleros y navegantes con la intención de visitar el lugar, ciertamente es un lugar lindo donde parece que el tiempo se detuvo.

Hicimos una excursión hacia el interior, y sin esperarlo descubrimos las pequeñas cataratas de un riachuelo, no falto tiempo para echarnos de cabeza al agua, laura no dejaba descansar la máquina de fotos y yo comía algún mango de los que se encontraban a la orilla del rio.

Ya en Almiralty Bay (Bequia) fondeamos en una tranquila bahía muy concurrida por otros veleros que la utilizan como escala en sus rutas, para aprovisionarse de lo mas elemental, estuvimos tres o cuatro días en los que la anduvimos, comprobando una vez mas como casi todas las islas de habla inglesa tiene una forma muy similar ser y vivir, de atender a extranjero. Por cierto todo bastante caro, y un poco mas si eres blanco.

Mas allá nos esperaba Canouan, donde solo paramos una noche, una isla que hasta hace poco tiempo no tenía muchas expectativas de formar parte de las escalas del circuito del Caribe, una isla casi olvidada, pero, que tras las fuertes inversiones del capital italiano, está empezando a experimentar un resurgir, pues en sus planes existen varios proyectos para incluirla en otras de las interesantes ofertas turísticas de la zona.

Tras pasar una noche un tanto incomoda ya que viento y ola no coincidían arrumbamos hacia Mayreau estos han sabido sacar todo el partido posible a las constantes visitas de navegantes que reciben, no en vano la naturaleza la ubicó a solo 3 ó 4 millas de los famosos, magníficos e inolvidables Cayos, la transparencia de las aguas, con una amalgama de color entre azules y verdes turquesas que no creía posible, una experiencia de naturaleza que para siempre quedarán en nuestra memoria, marchamos con una experiencia que seguramente el tiempo jamás borrará. Tras nadar junto a una manta que servía de refugio a un pez multicolor, o tras ver como un par de tortugas se daban el piquito,

Tras varios días de estancia y con toda la precaución que la zona exige, tras estudiar bien la carta dirigimos nuestra proa hacia Unión island otra isla de pasado inglés en la cual fondeamos protegidos por una barrera de arrecifes de coral, un pueblo tranquilo donde tramitamos nuestra salida con dirección a Carriacou y Grenada, un lugar que al igual que los anteriores solo ofrecen algo de fruta y un par de pequeñas tiendas, una calle en la que nunca para de sonar a grán volumen la música afro-antillana.

Realizamos nuestra entrada oficial en Carriacou, unos señores muy serios nos atendieron en la tramitación de los documentos y tras comprobar nuestros pasaportes y cobrar las correspondientes tasas ya estábamos en el ultimo tramo de nuestro periplo, desde Grenada partiríamos nuevamente hacia Venezuela no sin hacer una agradable parada en Los Testigos, siempre que hemos estado con ellos han conseguido hacernos sentir como unos mas de la comunidad como unos mas de su familia, y esta vez para no ser menos nos invitaron a la fiesta del 74 cumpleaños del papá de Benjamín, fué una velada inolvidable en la que la música, la bebida, y la comida ofrecida de todo corazón no faltó en toda la noche, nosotros obsequiamos a su padre con una tarta, pues era lo único que teníamos a nuestro alcance hasta que no estuviéramos en Margarita, de todo corazón Gracias a Benjamín, Gracias al Patrón de la negra, y como no gracias a Félix el del caballo, que con su vieja guitarra y su desgarradora voz nos ofreció su mejor repertorio, Gracias a los Testigos.

Hoy estamos ya en Porlamar (Margarita), posiblemente en los meses que seguidamente permaneceremos en este País avanzaremos nuevamente hacia el oeste hasta llegar a Los Roques.

Estamos pensando en dirigirnos hacia Guatemala y Honduras países herederos de la cultura Maya paises inexplorados por la mayoría de navegantes, intentaremos adentrarnos a través de Riodulce hasta el Lago Izabal, unos de los mejores lugares de protección contra huracanes, hasta entonces disfrutar de las fotografías que nunca faltarán en este blog.